Si te preguntas qué hacer en Barcelona, tres días son suficientes para conocer los principales monumentos y lugares de interés de la ciudad. Eso sí, siempre que planifiques bien tu tiempo. En este sentido, teniendo en cuenta el excelente servicio de transporte público local, puede salirte rentable reservar una habitación en cualquiera de los hoteles cerca del aeropuerto de Barcelona (BCN).
Ya te decantes por esta opción o te alojes en el centro, estos son los atractivos turísticos y actividades en Barcelona que, obligatoriamente, han de formar parte de tu itinerario de visitas:
- Visitar el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia
- Contemplar el resto de construcciones emblemáticas de Gaudí, como es la Casa Battló, el Parque Güell o La Pedrera
- Ir a la playa de La Barceloneta
- Dar un paseo por La Rambla
- Sumergirte de lleno en el Barrio Gótico
- Subir al Tibidabo
Día 1: Explorando la obra de Antoni Gaudí
Vamos a suponer que llegas a la terminal de llegadas del aeropuerto de Barcelona (BCN) por la mañana, lo que te permitirá aprovechar al máximo el día. Nada más dejar el equipaje en el hotel, usa las líneas L2 o L5 del metro para llegar a la Sagrada Familia. Eso sí, te aconsejamos reservar la entrada de antemano, ya que es el monumento más visitado de España y en él se forman largas colas.
Lo mismo podemos decirte respecto al Parque Güell, que seguramente es el segundo monumento más famoso de la obra de Gaudí y de Barcelona. Su mirador te dejará sin palabras. Recuerda hacer una parada por el camino entre ambos lugares en el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, que es otra de las grandes joyas del modernismo catalán, obra de Lluís Domènech i Montaner.
Cuando termines esta visita, pon rumbo al barrio de Gracia y, en concreto, al Paseo de Gracia. Allí se encuentran otras dos grandes obras de Antoni Gaudí: la Casa Batlló y La Pedrera.
Día 2: Conociendo la otra cara del centro de Barcelona
Al día siguiente, usa el metro o cualquier otro medio de transporte para llegar a la plaza de Cataluña, que es la más famosa y visitada de la ciudad. Asimismo, es la puerta de entrada al Barrio Gótico, que está repleto de edificios y palacios del estilo arquitectónico que le da nombre. El más famoso de todos es la catedral de la Santa Creu i Santa Eulàlia. El Palau de la Música Catalana –obra de Domènech i Montaner–, que ostenta la consideración de Patrimonio de la Humanidad, es otro de los lugares que no te puedes perder.
Por la tarde, el mejor plan es pasarlo en La Rambla. Sin duda, se trata del principal centro neurálgico de la ciudad. Está repleto de tiendas, cafeterías, bares y pubs en los que disfrutar del “tardeo”, restaurantes... Incluso suele haber gente tocando música en directo.
Día 3: Acabando el viaje con tranquilidad
Al amanecer del último día te recomendamos emprender la subida al Tibidabo. Al contrario de lo que puedas pensar, el recorrido no es demasiado exigente. Hasta lo puedes hacer en transporte público. Las vistas son excelentes y alberga un parque de atracciones ideal para niños y adultos. Después, cuando recuperes fuerzas, baja y pasa lo que queda de día en La Barceloneta. Sin duda, la mejor manera de recargar las pilas antes de dirigirte a la terminal de salidas del aeropuerto de Barcelona (BCN) para regresar a tu hogar.
Ahora que ya lo tienes todo, si vas a Barcelona de vacaciones, te recomendamos que también visites sus alrededores como la Costa Brava o la Serra del Montsant. Una ruta en coche por Cataluña hará que tu recuerdo de Barcelona sea inolvidable. Reserva tu coche de alquiler en Barcelona a precios increíbles con el catálogo de eDreams. ¡Barcelona y Cataluña te esperan sobre ruedas!