Las Islas Madeira están siendo redescubiertas como el lugar ideal para viajeros que buscan un sitio disponible para pasar vacaciones en cualquier estación del año. Tradicionalmente conocidas como un destino tranquilo, Madeira es habitualmente escogido por parejas de edad y parejas en luna de miel, no excluyendo cualquier otro tipo de viajero. Pero ahora, finalmente, Madeira está recibiendo la atención merecida como un destino vibrante, repleto de innumerables spas y hoteles con una decoración espléndida, todos instalados en una isla de una inmensa belleza natural.
Madeira tiene ahora un gran magnetismo para los excursionistas que buscan algo activo y estimulante. Madeira es perfecta para caminar durante todo el año, dado que las temperaturas son también templadas en invierno. El rico patrimonio natural y cultural aliado a una saludable gastronomía, a la estabilidad política y social y a la hospitalidad de sus habitantes, transmiten un clima de seguridad, que hacen de este destino un lugar privilegiado para sus vacaciones.
Para reponer energías, podrá escoger el refinamiento de la ya conocida hostelería tradicional, u optar por las más recientes soluciones de alojamiento, establecimientos de menor dimensión en zonas rurales que permiten un contacto más estrecho con la población y la naturaleza.
Aquí encontrará un paraíso para su salud y bienestar, que le proporcionará unas vacaciones relajantes y vigorizantes en cualquier época del año.
En Madeira hay también un variado número de deportes practicables no sólo en el cálido mar, sino también en lo alto de la montaña. La pesca atrae a los mejores buceadores del mundo y bucear en las reservas marinas garantiza los encuentros con muchas especies exóticas submarinas, tales como la raya manta y las tortugas. La isla de Porto Santo, se convirtió en un oasis para todo tipo de deportes imaginables, enorgulleciéndose de su maravilloso campo de golf, diseñado por Severiano Ballesteros, que sirve como complemento a su playa de arena blanca, conocida por sus poderes terapéuticos.
Llegar a Madeira ya no es un problema, con su nuevo aeropuerto que puede recibir 3,5 millones de pasajeros fácilmente. La pista de aterrizaje fue ampliada de 1.800 metros a 2.781, permitiendo un seguro y fluido tráfico aéreo, que destacaron la seguridad y excelencia de la pista de aterrizaje de la gateway de Madeira.
