Qué ver en Grecia: descubre las mejores islas del paraíso mediterráneo

Si estás pensando en hacer una escapada por el Mediterráneo pero no sabes por dónde empezar, no te pierdas nuestra lista de las mejores islas que ver en Grecia. ¿Qué te parece pasar unos días disfrutando del sol y del mar? Suena bien, ¿verdad? Y es que no es de extrañar que las islas griegas sean uno de los destinos más bonitos e idílicos. El paisaje destaca por sus casas blancas, aguas turquesa, románticas puestas de sol, su historia mitológica y su gastronomía. Esta es la descripción de Grecia, uno de los destinos de playa más populares de Europa. Pero con más de 6.000 islas e islotes, ¿cómo podemos asegurarnos que hacemos la mejor ruta? Descubre, a continuación, las islas más bonitas que visitar en Grecia.

1. Visitar la famosa isla de Santorini

Es, sin duda alguna, la isla más conocida. Puedes llegar hasta allí en avión o bien, si lo deseas, en barco hasta el puerto de Athinios. Si a parte de sol y playa estás buscando un lugar romántico con vistas espectaculares y vida nocturna, esta  isla debe estar en tu lista de sitios que ver en Grecia. De origen volcánico, te sorprenderá el color negro de sus playas escarpadas, que contrasta con el mar azul y las casas blancas. Algunas de las más recomendables son la Playa Roja, la Playa Blanca, Kamari y Perissa. El centro de la ciudad tiene el privilegio de estar situado en el lado occidental de la isla desde donde podrás disfrutar de impresionantes puestas de sol mientras terminas el día degustando alguno de los platos tradicionales de la zona como son el pulpo a la parrilla, hummus de fava o las dolmas. 

2. Relajarse en la desconocida Paxos

Muy cerca de Corfú, Paxos es la segunda isla más grande de las Islas Jónicas. A pesar de ser una gran desconocida, si quieres disfrutar de unos días de desconexión, Paxos debe figurar en tu lista de islas que ver en Grecia. En ella, encontrarás un auténtico oasis de tranquilidad, relax y privacidad. Se trata de una pequeña isla verde y boscosa, cubierta de olivos y rodeada de   playas maravillosas, como la playa de Soulanena, Kloni Gouli, Gianna, Kipiadi (accesible sólo a pie o en barca) y la Bahía Golondrina.

 La capital, Gaios, ofrece una imagen digna de postal por su arquitectura tradicional de estilo neoclásico, donde resaltan las persianas y balcones coloridos de las casas. No puedes irte de la isla sin antes visitar alguno de sus restaurantes, donde podrás disfrutar de marisco y pescado fresco. El mejor momento para disfrutar de la mágica atmósfera de este lugar es por la noche, cuando los turistas que visitan la isla durante el día se marchan y puedes sentarte en un bar para degustar una copa de Ouzo, un licor griego con un fuerte sabor dulce y olor a regaliz. La isla solo es accesible en barco. Desde el puerto de Igoumenitsa se tarda una hora. Desde Corfú, alrededor de media hora.

3. Vivir la fiesta en Miconos

Su fama la precede y es que Miconos es una de las mejores islas griegas si te gusta la fiesta y te apetece descubrir la vida nocturna de uno de los destinos más famosos del mundo. Aunque sea conocida sobre todo por este aspecto, Miconos es, sin duda, una isla que visitar en Grecia también por la belleza de sus paisajes. En su capital, Chora, podrás pasearte por calles idílicas formadas por casas de formas redondeadas, todas ellas blancas con balcones y ventanas azules. Algunos de los puntos más destacables de la localidad son la Pequeña Venecia, los Molinos de Mulonos, las múltiples iglesias que te irás encontrando a cada paso y el Museo Arqueológico. 

Como no podría ser de otra manera, Miconos también tiene playas paradisíacas que te dejarán sin palabras. Algunas de las mejores donde relajarte y evadirte del ambiente de la capital son la Playa Paraíso, la Playa Elia, Kalafato y Panormos. Además, uno de los detalles más importantes acerca de la isla, es que se trata de una de las mejor comunicadas. Se puede acceder a ella en avión o bien en ferry y, una vez allí, puedes escoger si alquilar un coche o moverte en transporte público.

4. Explorar Creta, la mayor de las Islas Griegas

370 kilómetros de historia, mitos y playas verdes, blancas y azules. Así es Creta. La isla más grande que ver en Grecia, entre las más de 6.000 que forman el país. Viajar a Creta es adentrarse de lleno en el mundo de la mitología griega. Cuenta la leyenda que el mismísimo Zeus nació en la isla y Minos, uno de sus hijos y rey minoico del Palacio de Cnosos, encerró al Minotauro en un laberinto. Este famoso palacio, junto con el Palacio de Festos, el de Gortina y el Agia Triada con algunos de los yacimientos arqueológicos imprescindibles que ver en Creta.

A parte de conocer su historia, también podrás recorrer parajes naturales impresionantes yendo de excursión por alguno de sus Parques Nacionales, como la Garganta de Samaria o Las Montañas Blancas. No puedes tampoco dejar de visitar su capital, Heraklion, una ciudad que combina modernidad con historia, donde podrás visitar el Museo Arqueológico y la fortaleza Koulés. Por último, las playas de Creta son, sin duda, uno de los lugares que visitar en Grecia durante tu escapada. Algunas de las más recomendables son la Playa de Elafonisi, la Playa de Balos en Gramvousa y las playas de la Isla de Gavdos. Puedes llegar a la isla en avión, en uno de sus tres aeropuertos: el Aeropuerto Internacional de Heraklion (Kazantzakis), el Aeropuerto Internacional de Chania (Daskalogiannis, en la bahía de Souda), y el  aeropuerto de Sitia que solo se utiliza para vuelos domésticos. O bien en ferry desde Atenas.

5. Conocer la multicultural isla de Kos

A solo 4 kilómetros de las costas de Turquía se encuentra la isla de Kos, un rincón que visitar en Grecia repleto de historia y con una mezcla de culturas únicas por su proximidad a Asia. ¿Sabías que es el lugar de origen de Hipócrates, padre de la medicina occidental? Para llegar a la isla, puedes hacerlo en avión desde Atenas.

Debes empezar tu recorrido por la isla visitando el Templo de Afrodita, muy próximo al puerto de la capital Kos. A tan solo 15 kilómetros de la ciudad, se encuentra el Santuario de Asclepeion, construido sobre tres terrazas desde las cuales tendrás unas vistas espectaculares de la isla. Si, por otra parte, te apetece visitar una ciudad donde encontrar una gran oferta en restauración, no te puedes perder Kardamena, en la costa oriental de la isla. Y, ¿cuáles son las mejores playas que ver en Kos? Añade a tu lista los siguientes nombres: Agios Agios Fokas, Mastichari, Camel y la región de Kefalu.

6. Descubrir Rodas, la capital del Dodecaneso

Fruto de la pasión entre el Dios del Sol Helios y la ninfa Rode, tal y como cuenta la mitología griega, la isla de Rodas es la mayor del archipiélago del Dodecaneso y un punto imprescindible en tu lista de sitios que visitar en Grecia. Famosa por el histórico Coloso de Rodas, considerado una de las siete maravillas de la antigüedad, hoy en día la isla reúne desde las ruinas de la Acrópolis hasta la zona medieval, con murallas, minaretes, palacios y fortificaciones que te dejarán impresionado.  

En tu ruta por la isla, no puedes perderte el castillo de Monolithos, el valle de las Mariposas, el parque natural de Epta Pige, el puerto de Mandraki y el singular pueblo de Lindos con sus particulares calles encaladas. Para conocer del todo la isla, asegúrate de añadir estas playas a tu lista de lugares que ver en Rodas: la Playa de Prasonisi, Afandou y Vlycha son algunas de las más famosas. Durante tu viaje a las Islas Griegas, puedes llegar hasta Rodas en avión y también en ferry desde otros puntos como Santorini y Creta.

7. Relajarse en la isla de Tinos

¿Buscas evadirte y vivir unos días de auténtica tranquilidad? Si prefieres los destinos poco concurridos y disfrutar de la naturaleza, la isla de Tinos es tu paraíso ideal que ver en Grecia. Se trata de una isla repleta de montañas y senderos rodeados de flora y fauna. En la pequeña y remota Tinos se encuentra el santuario de Panagía Evangelístria, donde el día 15 de Agosto (dedicado a la Virgen María), acuden un gran número de peregrinos de la Iglesia Ortodoxa.

Al tratarse de una isla montañosa y con unos paisajes muy escarpados, verás que acceder a alguna de sus playas no es del todo fácil. Sin embargo, vale la pena andar un poco más y aventurarse para disfrutar de rincones paradisíacos sin casi nadie a tu alrededor. Algunas de las más sorprendentes son la Playa de Ayio Sosti, Kionia, Pánormos, Libada o Fero Jorio. Para llegar hasta la isla de Tinos, deberás hacerlo en barco desde el Pireo o desde Miconos, hasta el puerto de la misma capital Tinos.

8. Visitar Icaria, la isla de la longevidad

Situada en el Mar Egeo, a unos 20 kilómetros de la Isla de Samos, debe su nombre al hijo de Dédalo, Ícaro, quien según cuenta la mitología griega, murió cerca de la isla. Icaria reúne todo lo que necesitas para vivir una escapada de ensueño: playas de aguas turquesa, paisajes montañosos llenos de vegetación, aguas termales y restos arqueológicos llenos de historia. Su belleza radica en ser inaccesible: montañosa y salvaje, lo que la convierte en una isla imprescindible que visitar en Grecia. ¿Sabías que su población es una de las más longevas del planeta? Se debe sobre todo a la dieta mediterránea que siguen sus habitantes. 

Otro de las características más sorprendentes de la isla es que en varias de sus calas el agua del mar se mezcla con aguas termales. Algunas de las más espectaculares que visitar en Icaria son la Playa de Iero, Agios Giorgi, Therma, Prioni, Kilosirtis. Para completar tu escapada, no puedes irte sin antes visitar la capital, Agios Kirikos, donde también se encuentra el Museo Arqueológico, el Castillo bizantino di Koskina, el Templo de Artemisa en Nas y las ruinas de las Termas, parte de ellas visibles haciendo snorkel. Por último, puedes llegar a la isla en avión desde Atenas o bien en ferry, también desde la capital griega.

9. Sentir la tradicionalidad en Skyros

Skyros es la isla más grande del archipiélago de las Espóradas, en la parte occidental del mar Egeo. Si decides desplazarte hasta allí en avión, podrás ver claramente como la isla se divide en dos partes, conectadas por un istmo. La parte norte, con una vegetación verde y frondosa, reúne las zonas más pobladas de la isla, mientras que la parte sur, es la más árida y montañosa. Esta peculiaridad, junto con la tranquilidad que se respira y su rica tradición folklórica, la convierten en una de las islas que ver Grecia sí o sí. 

Las calles de la capital, Chora, ascienden la ladera de una colina muy próxima al puerto. A lo alto, se encuentra un antiguo castillo y la iglesia de San Jorge, desde donde podrás disfrutar de unas vistas increíbles de toda la isla. Otras poblaciones que vale la pena visitar en la isla son Pefcos, Agios Petros, Ajerunes y, en barca, Tris Bukes, donde te recibirá su puerto natural, antiguo refugio pirata durante la época medieval. ¡Y no nos olvidemos de las playas! Si prefieres gozar de tranquilidad e intimidad, las mejores son Kira Panagia, el Cabo Markeki, Agios Fokas y la Playa de Palamari. Si por el contrario, te apetece poder tomar algo durante el día, acércate a Kalogria, Aherounes, Kalamitsas o Pefkos.

10. Conocer Gavdos, la isla más meridional

Es la isla más meridional de Europa, solo después de Chipre, y uno de los puntos indispensables que visitar en Grecia por su carácter y paisajes únicos e intactos. Es una isla de tan solo 10 kilómetros de largo, montañosa y llena de espectaculares acantilados. En ella, no encontrarás grandes puntos turísticos, ni siquiera muchos visitantes. Se cree que solo habitan la isla unas 40 personas aproximadamente, muchas de ellas artistas, que eligieron vivir aquí alejados de la rutina diaria todas ellas buscando la paz en una de las costas más bellas de Grecia. El punto más famoso de Gavdos es el Cabo Tripiti, el punto más al sur de Grecia. Si te gusta disfrutar del sol y el mar en playas salvajes, esta isla es tu lugar ideal. Algunas de las mejores que visitar en Gavdos son: la playa Sarakiniko, Giannis, Pyrgos o Potamos.

11. Descubre la isla de la Venus de Milo

Como bien anuncia en nombre de la isla, Milos, la famosa estatua de la Venus de Milo, uno de los símbolos de la belleza clásica por excelencia, fue descubierta en esta isla. Fuera del circuito turístico de masas, esta isla situada al suroeste de las islas Cícladas, se caracteriza por un paisaje lunar con rocas y arenas blancas casi virgen. ¿Sabías que en toda la isla hay más de 71 playas distintas? Sin embargo, la más espectacular es la Playa de Sarakiniko. Pasear entre sus rocas y el agua turquesa hará que te transportes prácticamente a otro planeta. Otras playas muy recomendables de la isla son Papafragas, Apollonia y Papikinou.

Después de relajarte tomando el sol, acércate hasta el pueblecito de Adamas y pasea entre sus calles blancas hasta llegar a la iglesia. Otro de los puntos que visitar en Milos es la pequeña localidad de Klima, donde destacan sus casas-embarcadero por el contraste de sus colores con el azul turquesa del agua. Y, por supuesto, no puedes irte de la isla sin visitar su capital, Plaka, una ciudad llena de historia donde podrás visitar el Museo Arqueológico, un castillo veneciano del siglo XIII y la llamada Cueva de Hipócrates.

Con más de 6.000 islas, Grecia es un auténtico paraíso en el Mediterráneo, lleno de historia, paisajes espectaculares y una de las gastronomías más aclamadas del mundo. Y tú, ¿ya sabes qué isla te gustaría explorar primero?