Desde hace ya cerca de un año que Renfe y Adif están trabajando conjuntamente para probar un nuevo sistema para poder acelerar la velocidad de los trenes del AVE. Si actualmente el límite máximo de velocidad comercial es de 300 kilómetros por hora, el sistema que se implementará en un corto plazo permitirá a la Alta Velocidad llegar a los 350 kilómetros por hora.
Renfe y Adif están por terminar ya los cambios necesarios para poder implementar esta aceleración de los trenes veloces. Pero todavía hace falta que se concluyan otros pequeños ajustes.
Por un lado, ya se cuenta con el Sistema Europeo de Gestión del Tráfico (Ertms), una tecnología para la cual ya están adaptados los vagones de Renfe, según asegura la empresa.
El paso que queda por concluir sería la adopción del segundo nivel en el sistema Ertms, que será lo que permita conseguir las nuevas velocidades. Con la implantación de esta tecnología quedaría solamente afinar la relación entre el nuevo método de señalización y los convoyes.
Según ha anunciado Renfe, ya se encuentran en una etapa “muy avanzada” de la fase de pruebas, que se están realizando en primer lugar en la línea del AVE Madrid-Málaga.
Por último, el presidente de la operadora ferroviaria afirma que de todos modos no se piensa en explotar al máximo el aumento de la velocidad potencial de estos trenes, sino que se llegará seguramente hasta los 330 kilómetros por hora en las operaciones. Esto obedecería a razones de eficiencia energética, pues no tendría sentido ahorrar tiempo de viaje pero teniendo que gastar más en combustible.