El pasado viernes el INE (Instituto Nacional de Estadística) hizó pública una serie de datos referentes al uso de los transportes en España durante el mes de julio, tanto por aire como por mar y tierra: aviones, barcos, autobuses y trenes, incluyendo entre éstos, por supuesto, la alta velocidad.
Según los números registrados, la aviación experimentó una caída del 16,5% mientras que el uso del transporte ferroviario descendió un 1,4%. Algo más de 108,7 millones de personas usaron un transporte interurbano, lo que significa un 2,1% menos. El único medio que ganó pasajeros fue el marítimo.
En lo referente al tren, la mayor caída se registró en la Media Distancia, un 7,1%, por un 1,8% de Cercanías. Los datos también incluyen el transporte en Metro que, sorprendentemente, disminuyó un 4,6%, especialmente en Palma de Mallorca y Madrid, con bajadas respectivas del 16,9% y 8,1%.
De hecho, el transporte urbano en general cayó un 1,9%, con 212 millones de viajeros e incluso el autobús tuvo bajadas generalizadas salvo excepciones (Aragón, madrid, Extremadura, País Vasco, Galicia y Canarias).
Y es que los transportes públicos, tanto urbanos como interurbanos, especiales y discrecionales, tuvieron 344,8 millones de usuarios, un 1,9% menos que el mismo período del año anterior, lo que revela que la gente sigue afectada por la crisis económica y opta, quizá, por el automóvil.
Pero, volviendo al sector ferroviario, hay un capítulo que experimentó una mejora: la Larga Distancia, que tuvo un alza del 13,7%. En ella se incluyen los datos del AVE, beneficiado por la nueva política de tarifas.
Vía: Europa Press
