La línea del AVE Madrid-Valencia comenzó a funcionar el 19 de diciembre del 2010 y a lo largo de estos tres años ha arrojado buenas cifras de tráfico en sus operaciones. Podemos decir que el tráfico ha tenido un balance positivo, pues los servicios de Alta Velocidad transportan actualmente a casi el triple de pasajeros que los trenes Alaris en el 2010.
Así, frente a los cerca de 750.000 viajeros que utilizaron los Alaris entre Madrid y Valencia en el 2010, el año pasado el tráfico del AVE en esta línea llegó a los 2,04 millones de pasajeros. Centrándonos únicamente en el trayecto completo entre Valencia y la capital española, esta cifra ha sido se 1,8 millones de usuarios.
Esta evolución del tráfico ferroviario ha supuesto una evolución paralela en sentido inverso para el avión, que ha experimentado una notable caída del tráfico con la llegada de los trenes veloces hacia Valencia. Desde el 2010, el tráfico aéreo entre Barajas y el aeropuerto valenciano de Manises se ha reducido en casi un 80 %.
Por su parte, la línea del AVE Madrid-Alicante ha sido todo un éxito en cuanto al tráfico registrado desde su inauguración, el pasado 18 de junio. Pues desde su puesta en marcha y hasta el cierre del 2013 estos servicios fueron utilizados por más de un millón de pasajeros, lo cual supone un incremento del 50 % frente al mismo periodo del año anterior.
Creo que se puede considerar un gran logro para los que apostaron por los trenes de alta velocidad como medio para unir territorios y comunidades en España.