Tal parece que las elecciones de los viajeros están sufriendo un cambio importante y que los que hasta ahora eran los medios más rápidos dejan de serlo. De hecho, las estadísticas muestran una pugna permanente entre la cantidad de viajeros que eligen viajar.
Esta pugna en entre el tren de alta velocidad y el transporte aéreo comenzó desde el momento mismo en el que comenzaron los servicios del AVE en su recorrido Madrid-Barcelona en febrero de 2008 y las estadísticas aparecen cada mes confrontadas, a veces dándole la ventaja a uno y a veces al otro. Lo cierto es que resulta claro que la opción de viajar por tierra es cada vez más atractiva a los usuarios.
¿Las razones? Probablemente la sensación de seguridad. Sin lugar a dudas las tarifas y el ahorro del tiempo. Hay un tema energético que también juega allí un papel importante ya que un punto crítico de los aviones es la gasolina que necesitan mientras que el AVE es considerado mucho más “ecológico”.
La versatilidad y las ofertas que tiene los viajeros en tren a la hora de decidir cuándo viajan y de resolver cualquier trámite administrativo frente a las que lo hacen en avión apunta a la ganancia de los primeros. Hay rutas, sin embargo, que aún no permiten la elección. De haberla, es probable que la mudanza sería aún más dramática.
Si el AVE aumenta la velocidad punta a 350 km/hora , la duración del viaje MADRID-BCN sin paradas , no superará las 2 horas 15 minutos o tal vez incluso algo menos . Eso siempre que funcione el sistema ERTMS nivel 2 y que el balasto ( las piedras que sostienen las vías ) no se levante. A 350 km/hora sería la puntilla para el avión. Saludos.