Hace unos días se publicó un estudio realizado por Amadeus sobre el tráfico ferroviario de larga distancia, incluyendo la alta velocidad, que lleveba por título The rail journey to 2020, es decir, “El viaje en tren hacia 2020”.
El informe destaca que gracias a una serie de factores estructurales, regulatorios, tecnológicos y comerciales este sistema de transporte experimentará un gran crecimiento en Europa en los años que faltan hasta 2020, Concretamente se calculan 238 millones de pasajeros más respecto a la primera cifra tomada como referencia, la de 2011, en la que hubo 1.120 millones.
En porcentaje significa un incremento del 21% a una media del 2% al año hasta llegar a 2020, en que se contabilizarán unos 1.358 millones de viajeros. Tres países europeos serán los principales impulsores: Reino Unido, Francia y Alemania, que aglutinarán el 70%. España aportará un 0,5% anual más, equivalente a 38,4 millones.
Los factores que determinarán esta tendencia son la liberalización del mercado ferroviario en la UE a partir de 2019 (en España ya este año 2013), la correspondiente instauración de nuevas empresas en estrecha competencia por mejorar precios y ganar clientes, la programación de nuevas rutas, la primacía de itinerarios con potencial especial, la colaboración entre compañías y el ajuste de costes.
De los citados 1.358 millones de pasajeros de larga distancia para 2020, 461 millones (o sea, el 34%) corresponderán a alta velocidad; en 2011 eran 320 millones, el 28,5%. Ello supone un crecimiento medio anual del 6% en los próximos 7 años. En España el AVE crecerá a un ritmo menor que en el resto de Europa pese a que equivaldrá a la mitad de los viajes en larga distancia del país: de 38,4 millones de viajes, 22 millones (el 57%) serán en alta velocidad, un 30% más que en 2011; aquel año fueron el 45% del total, 17 de 37,8 millones.
Por último, señalar que en Europa se construirán 5.000 kilómetros más de líneas de alta velocidad, pasando de 11.000 a 16.000. De ellos, 1.700 corresponderán al AVE español. Además, algunas de esas líneas se conectarán a hubs aeroportuarios para compartir viajeros y que éstos terminen sus conexiones en tren a ciudades situadas a distancias inferiores a 3 horas, aspirándose a sumar 37 aeropuertos en 2030.
Vía: expreso.info
Foto: albertizeme en Flickr