La titular de Fomento, Ana Pastor, ha anunciado que el consorcio español que obtuvo la concesión de los trabajos de construcción del AVE árabe entre La Meca y Medina empezará a colocar las vías este mes, antes de que finalice 2013.
“El consorcio adjudicatario acaba de terminar el diseño preliminar y está ya en condiciones de comenzar a tender las traviesas, la catenaria y el balasto de este AVE, una obra que supondrá un escaparate para el mundo de las empresas públicas y privadas españolas”, explicó la ministra.
La línea entre las ciudades sagradas de La Meca y Medina mide 450 kilómetros. El recorrido se realizará con 35 trenes Talgo cuya capacidad es de 450 plazas cada uno y alcanzan una velocidad de 300 kilómetros por hora, lo que permitirá reealizar el viaje en 2 horas y media.
Su creación se debe a la necesidad de transportar a los millones de peregrinos que cada año visitan esas ciudades siguiendo uno de los pilares del Islam; aunque no todos recurrirán al tren, los cálculos apuntan a que habrá unos 60 millones de pasajeros anuales.
El consorcio español, que ganó el concurso hace ahora 2 años, cuenta con un presupuesto de 6.736 millones para construir las vías, los sistemas de comunicación y los de seguridad de este peculiar ferrocarril de alta velocidad que atraviesa el desierto.
Está formado por una combinación de empresas públicas (Adif, Renfe e Ineco) y privadas (ACS-Cobra, Consultrans, Copasa, Dimetronic, Imathia, Inabensa, Indra, OHL y Talgo), a las que se suman otras dos árabes (Al Shoula y Al Rosan). Una vez concluidos los trabajos de construcción, Renfe tiene un contrato de explotación por 12 años.