Esta semana se ha inaugurado la segunda conexión de alta velocidad entre Alemania y Francia, poniéndose en circulación los nuevos trenes entre Marsella y Frankfurt.
Ha sido ayer cuando se puso en marcha esta línea que será explotada de forma conjunta por la francesa Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF) y la alemana Deutsche Bahn (DB). A partir de ahora, los trenes Euroduplex que cubren este trayecto harán el recorrido en una hora y media, gracias a su velocidad punta que puede llegar a los 320 km/h. Estos convoys de dos plantas tienen una capacidad máxima para 509 viajeros.
En 2007 fue cuando se inauguró la primera conexión de alta velocidad franco-alemana. Se trata de la línea París-Munich-Stuttgart, por la cual ya han pasado unos seis millones de viajeros. Y este es otro “nuevo paso hacia la internacionalización del tráfico ferroviario en Europa”.
En la misma dirección pretende ir nuestro país, con los futuros enlaces entre Paris y Barcelona, una línea que explotada conjuntamente por Renfe y la francesa SNCF. Así se establece en el plan estratégico 2011-2012 de la empresa española, que recoge entre sus objetivos hacerse un hueco en el mercado internacional.