Ya desde 2006, con la inauguración de la Estación de María Zambrano, los usuarios malagueños comenzaron a reclamar que el nombre de la ciudad debería aparecer junto al de la filósofa que da el nombre a estas infraestructuras.
Después de estos años, finalmente la terminal de trenes de Adif, unida al centro comercial Vialia, comienza a reflejar en sus rótulos de acceso el nombre de la localidad andaluza.
La reforma se ha llevado a cabo por motivos especialmente simbólicos defendidos por los ciudadanos, que defienden que los cambios que han tenido lugar gracias a la inauguración de la estación deberían ir presididos del nombre de Málaga.
El cambio no afectará solamente a los rótulos de entrada al edificio sino que afectará también a la denominación de la Estación de Málaga María Zambrano en los carteles, los billetes y los servicios de información.
El AVE a Málaga consiste un “escaparate de lujo” para el lugar, en palabras del secretario general del PSOE malagueño. Solamente hace falta ver las cifras del número de viajeros que indican que esta estación de Adif es la segunda de Andalucía en cuanto al tráfico. En los enlaces con Madrid, por ejemplo, gracias a la media de 22 servicios diarios de Alta Velocidad casi cinco millones de pasajeros la han utilizado durante el último ejercicio.
