Hace unos días comentábamos acerca de las reivindicaciones en el norte de Castellón sobre la necesidad de priorizar otros proyectos ferroviarios frente a la llegada de la Alta Velocidad . Algo similar se ha producido la semana pasada en Alicante, pues desde la Plataforma Renfe se han mostrado preocupaciones por el impulso a la llegada del AVE a esta ciudad, que puede hacer que se marginen otros “compromisos importantes”.
Al igual que lo que ocurre en el caso de las reivindicaciones en Castellón, el deseo de los vecinos de Alicante no es que las obras de la línea de Alta Velocidad se retrasen, sino que no se dejen a un lado otras cuestiones como el desvío de las líneas de Cercanías.
La consellera Isabel Bonig ha comunicado que las obras para la llegada del AVE a Alicante pueden terminarse en un plazo de entre seis y ocho meses. La Plataforma Renfe, por su parte, reclama que se debe exigir a Avant que “dé una solución” a las vías de los trenes de Cercanías en este mismo plazo. Según señalan desde esta asociación: “no podemos consentir que, para que llegue [el AVE] en el primer semestre de 2013, lo haga en precario y dejando incomunicados a los barrios”.
Desde la Plataforma destacan que Avant dio su compromiso con la búsqueda de fondos para desarrollar las obras de desmantelamiento de vías de Cercanías. Estos trabajos se tendrían que llevar a cabo paralelamente a la construcción de las nuevas vías para la Alta Velocidad. Después de tantos aplazamientos para realizar estas obras, los vecinos han señalado que no dudarán en realizar movilizaciones para “reclamar que cumplan lo comprometido”.