La segregación de Renfe en cuatro empresas diferentes, ligada a la liberalización del sector ferroviario en España, es una cuestión que se viene anunciando desde tiempo atrás. Pues esta división de la compañía ferroviaria en cuatro sociedades va tomando cuerpo y ya se tienen nuevos datos acerca de ellas.
Una de las cuestiones que se ha hecho saber recientemente es la referente a las deudas con las cuales nacen estas empresas. Aquélla que recibirá la mayor parte de la deuda actual de Renfe será la división de Renfe Viajeros, que se encargará del transporte de pasajeros tanto en los servicios públicos de Cercanías y Media Distancia como en las líneas comerciales como el AVE.
Según datos oficiales, esta sociedad anónima hereda una deuda que alcanza los 5.164 millones de euros, lo cual supone un 84,4 % del total de la misma. Esta cifra está ligada a la adquisición de trenes por parte de la empresa a lo largo de los últimos años, así como a los importes adeudados por el Estado y la Generalitat a cambio de la prestación de sus servicios como transporte público, que equivalen a un total de 674,8 millones de euros.
Por otro lado, se espera que su actividad reporte unos beneficios brutos de explotación cercanos a los 227 millones de euros para el año próximo, mientras que las previsiones de cara a finales de la década apuntan a más de 500 millones de euros.
La empresa que le sigue en nivel de deuda será Renfe Mercancías, que comenzará a funcionar con una deuda de 326,3 millones de euros (lo cual supone el 6,3 % del total). En este caso, los resultados esperados para este año y el próximo señalan números rojos, que llegarían a unos 56,5 millones de euros en pérdidas para finales del 2014.
Las otras dos sociedades restantes tras la división de la compañía ferroviaria son: Renfe Fabricación y Mantenimiento (su división industrial), que adeuda 297 millones, y Renfe Alquiler de Material Ferroviario, con una deuda de 112,71 millones (un 5,7 % y un 2,1 % del pasivo total, respectivamente).
Imagen de Eric Caballero en Flickr