Desde finales de 2009 Renfe está trabajando en la puesta en marcha de un tres AVE de ancho variable y tracción híbrida, es decir, que puede ser eléctrica o diésel: la Serie 730, que en realidad es una nueva versión de la S-130 pero adaptada a esa última exigencia.
La razón del S-730 está en el aprovechamiento inmediato de aquellos tramos de la red que aún carecen de electrificación, como ocurre en Galicia y Murcia. Este tren permitirá usarlos y adelantar así la llegada de la Alta Velocidad.
Para ello se acometió, a través de Integria, la transformación de 15 trenes S-130 a los que se deberían incorporar motores diésel a los eléctricos que ya tenían para usar con catenaria. Se trata de un proyecto único en el mundo desarrollado en colaboración con Talgo/Bombardier y que requerirá una inversión de 74 millones de euros.
El presupuesto es elevado al aplicarse a una serie limitada, algo que repercutirá en el coste por plaza. Más aún teniendo en cuenta que este tren perderá 34 asientos debido a la necesidad de convertir los vagones extremos de Preferente y Turista en CET (Coches Extremos Técnicos), donde se ubicarán generadores como los de las locomotoras BITRAC y Talgo BT. Tienen algo menos de potencia y deben incorporar un boje convencional para transmitir el peso, así como un rodal compartido con el siguiente remolque.
Las primeras pruebas sobre el terreno se efectuaron en junio, con vistas a la puesta en funcionamiento real hacia el segundo trimestre de este año, en la ruta entre Madrid y Galicia.
Foto: enpuntorenfe
Quitar los trenes alvia de Santander y poner finalmente a Santander el tren altaria.