Hace ya tiempo que surgió la idea y, de hecho, en este blog dediamos algún post a comentarlo, pero ahora empieza a concretarse, a ser una realidad: un AVE de bajo coste.
Cuando hablamos de bajo coste no nos referimos a la flexibilización de tarifas decretada por Fomento, sino de compañías ferroviarias low cost, igual que las líneas aéreas de ese tipo, ofreciendo billetes muy baratos a cambio de ciertas limitaciones en el servicio. El proyecto de liberalización ferroviaria previsto por el Gobierno puede traer algo en ese sentido.
Sin embargo, de momento es algo exclusivo de Francia, donde hace unas semanas el SNCF (servicio ferroviario galo) puso en marcha el llamado Ouigo, un tren de alta velocidad que hará su viaje inaugural esta primavera, el próximo 2 de abril, en una ruta que debe unir París con Marsella y Montpellier pasando por Lyon, Valence, Nimes, Avignon y Provence.
El TGV que cubre esos itinerarios regularmente cobra unos 85 euros por pasaje pero en el Ouigo costarán bastante menos, 10 euros los más baratos, aunque hay varias franjas. El ahorro es evidente y así se espera atraer un buen número de usuarios para amortizar la inversión y ser rentable en 2017. Al fin y al cabo Ouigo es un juego de palabras que adapta al francés la expresión anglosajona we go.
Eso sí, como decíamos antes, las condiciones de viaje no son iguales que en el TGV. El pasillo es más estrecho y sólo habrá una clase que admite 1.268 pasajeros (un 20% más) gracias a su doble piso. En cambio, se suprime el vagón restaurante y se dispondrá de menos espacio para el equipaje, cobrándose un extra por la segunda maleta, como suele ocurrir en las compañías aéreas y un cargo por usar tomas eléctricas.
También se parece a ellas en que operará estaciones secundarias, caso de Marne-La Vallée (París), aunque Saint-Exupery (Lyon), Saint-Charles (Marsella) y Saint-Roch (Montpellier) son céntricas. Además, las reservas se hacen exclusivamente on line, entrando en la página oficial
