Embárcate en este viaje para descubrir qué ver en Canadá a través de sus cuatro regiones más importantes. Un recorrido por Ontario, Quebec, Alberta y la Columbia Británica, de este a oeste de Canadá. En este artículo conocerás de cerca las ciudades más populares del país, como Toronto, Ottawa, Montreal, Calgary o Vancouver. Sin olvidar los grandes parajes naturales canadienses que no te puedes perder, como las Montañas Rocosas o las Cataratas del Niágara.
¿Todo listo para empezar a organizar tu viaje con todo lo que ver en Canadá?
Ontario
En esta provincia canadiense se encuentra la capital del país, Ottawa, así como otra de las grandes ciudades de Canadá, Toronto. Además de las famosas Cataratas del Niágara.
Admira los rascacielos de Toronto
¿Qué se ve desde la torre más alta de Toronto? “Toronto entero”. Si conoces el chiste, debes saber que la torre en cuestión es la CN Tower, que era el edificio más alto del mundo hasta que se construyó el Burj Khalifa de Dubai. Sube hasta el mirador a 440 metros de altura y tendrás las mejores vistas de la ciudad. Después, visita el Royal Ontario Museum, el museo de historia natural más grande de Canadá, un gran plan si viajas en familia.
Si quieres mezclarte con los locales, ves a comer a Saint Lawrence Market y no te pierdas su rastro de los domingos. Asómbrate con los rascacielos del centro financiero alrededor de Dundas Square, no en vano Toronto se conoce como la capital económica de Canadá. Tampoco te puedes ir de la ciudad sin caminar a orillas del Lago Ontario o dar un paseo en barco por sus aguas, tan extensas que te parecerán un mar. A partir de este lago nace el famoso río San Lorenzo, que desemboca en el Atlántico pasando antes por Montreal y Quebec. Por último, otro de los atractivos de Toronto es su cercanía a las Cataratas del Niágara, a unos 130 kilómetros, a las que podrás hacer excursiones de uno o más días.
Mójate en las Cataratas del Niágara
En las Cataratas del Niágara, uno de los lugares imprescindibles que ver en Canadá, confluye la frontera entre este país y el vecino Estados Unidos. En la pequeña localidad de Niagara Falls el único reclamo turístico son las cataratas, por lo que una visita de un día o máximo una estancia de una noche es suficiente para disfrutarlas. Situadas en el río Niágara, son las cataratas con más volumen de toda Norteamérica, ya que recogen el agua de la región de los Grandes Lagos de Canadá. Aunque no son tan altas como otras cascadas famosas, sus 52 metros de altura y su gran caudal aseguran un espectáculo natural único.
Una de las mejores actividades que hacer en las Cataratas del Niágara es un paseo en barco. Así podrás ver de muy cerca las tres cascadas del conjunto, la más grande de las cuales es la Horseshoe Falls, llamada así por su forma de herradura de caballo. Las otras dos se conocen como American Falls y Bridal Veil Falls, siendo esta última la más pequeña de las tres. Todos los paseos en barco incluyen un chubasquero, pero, incluso así, ¡te aseguramos que te mojarás!
Descubre Ottawa, la capital canadiense
En la frontera entre las provincias de Ontario y Québec se encuentra Ottawa, la capital del país, una visita imprescindible a la hora de viajar a Canadá. A orillas del río con el mismo nombre, es la cuarta ciudad canadiense en población y fue escogida como capital por la Reina Victoria en 1857. Por este motivo, una de las visitas esenciales en Ottawa es el Parlamento de Canadá, en el que podrás ver el cambio de guardia cada mañana a las diez. Te recomendamos reservar una visita guiada para ver salones impresionantes como el Senado o la Cámara de los Comunes. Finaliza tu visita subiendo a la Torre de la Paz y admira las vistas sobre la ciudad a 55 metros de altura.
Cerca del Parlamento también merece la pena visitar la Corte Suprema de Canadá. Así como ver desde fuera el Hotel Fairmont Chateau Laurier, perteneciente a la misma cadena que el famoso Chateau Frontenac de Québec. Tampoco te pierdas la Catedral de Notre Dame de Ottawa, la más grande y antigua de la ciudad, terminada en 1885. Relájate en el Major’s Hill Park, el más famoso de la capital y empápate de la vida local en Byward Market, un bullicioso mercado en el corazón de Ottawa.
Quebec
El francés es el idioma predominante en esta provincia de Canadá, dado que fueron los franceses quienes colonizaron estas tierras en el siglo XVI. Aquí se encuentran dos grandes metrópolis de la costa este del país, Montreal y Quebec.
Vive el ambiente cultural de Montreal
Montreal es considerada la capital cultural de Canadá, posee cuatro universidades y acoge más de setenta eventos internacionales cada año. Su nombre procede de la colina Mount Royal, origen de la ciudad y que ahora se encuentra en la zona norte, dentro del Parque Mount Royal. El centro de la ciudad se conoce como Vieux Montreal, famoso por sus calles adoquinadas y su variedad de restaurantes. En este se encuentra la Rue de Saint Paul, la calle más antigua de la ciudad y la animada Place Jacques-Cartier.
Uno de los lugares imperdibles que ver en Canadá es la Basílica de Notre Dame de Montreal, de estilo neogótico y con dos torres en la fachada principal inspiradas en la de París. En el interior, el diseño de sus vitrales se basa en el de la Sainte Chapelle de París. Además, ¿sabías que en esta catedral se casó Céline Dion en 1994? ¡No te la pierdas! Así como tampoco el Parque Jean Drapeau, situado en dos islas dentro del río San Lorenzo, un lugar para pasear, visitar la Biosphère o divertirse en su parque de atracciones.
Viaja a Francia en la ciudad de Quebec
¿Sabías que se dice que el Hotel Chateau Frontenac es el más fotografiado del mundo? Este hotel con apariencia de castillo se erige sobre el río San Lorenzo y aquí se han alojado grandes personalidades de todo el mundo. Sin duda, una de las joyas de Québec, igual que su casco antiguo, llamado Vieux Quebec, que fue nombrado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1985. Este se divide en la parte alta y en la parte baja, ambas llenas de callejuelas que te transportaran al pasado. En la parte de la Basse Ville no te pierdas el barrio Petit Champlain, uno de los más turísticos por su encanto y donde se encuentra la animada Place Royale. Reposta fuerzas con uno de los platos más populares de la gastronomía quebequesa, el poutine, patatas fritas con salsa de carne y dados de queso. ¡Una delicia calórica!
Además, la ciudad de Quebec es la única fortificada de Canadá, por eso te sugerimos visitar la Citadelle. La Ciudadela de Quebec está todavía en activo y es residencia oficial del Gobernador del país. Por último, reserva uno de tus días en Quebec para ver las Cascadas de Montmorency. No son tan grandes como las Cataratas del Niágara, pero sí más altas, con 83 metros de altura. Disfruta de su increíble salto de agua desde el puente colgante que hay enfrente, ¿te atreves?
Alberta
Una de las regiones más salvajes, Alberta es famosa alrededor del mundo por sus impresionantes paisajes. No te pierdas este lugar imprescindible que ver en Canadá, hogar de las Montañas Rocosas.
Descubre Calgary, capital de las Rocosas
Situada a ochenta kilómetros al este de las Montañas Rocosas, Calgary es la capital de la provincia de Alberta y la tercera ciudad más poblada de Canadá. Al igual que Toronto, Calgary también cuenta con una torre propia, la Calgary Tower. Desde su mirador disfrutarás de las mejores vistas sobre la ciudad, las Rocosas y sobre las grandes praderas de Alberta. Después, camina por la Stephen Avenue, una larga calle peatonal, hasta el casco histórico de Calgary, que conserva edificios muy pintorescos.
Si quieres conocer más a fondo la historia de esta ciudad canadiense, te recomendamos visitar el Fuerte de Calgary, un museo que narra desde sus orígenes como asentamiento de indios pies negros hasta el boom del petróleo en los años sesenta. Además, ¿sabías que Calgary es una de las capitales mundiales del rodeo? Cada julio se organiza el Festival Stampede, en el que, durante diez días, hay competiciones de cowboys montando caballos salvajes, toros o atrapando terneros con lazo.
Aventúrate en las Montañas Rocosas de Canadá
En poco más de una hora en coche desde Calgary llegarás al Parque de las Montañas Rocosas Canadienses. La UNESCO reconoció su belleza natural en 1984 nombrándolo Patrimonio de la Humanidad. Esta cordillera se encuentra en la frontera entre Alberta y la Columbia Británica y está formada por cuatro parques nacionales principales: Banff, Jasper, Kootenay y Yoho. Aquí nos centraremos en los dos primeros, aunque todos podrían estar en tu lista de cosas que ver en Canadá.
El Parque Nacional Banff es el más antiguo del país y el más famoso de las Montañas Rocosas. Sin duda, uno de los lugares más espectaculares de Canadá que no puede faltar en tu viaje. Un paisaje incomparable lleno de glaciares, lagos, ríos y animales salvajes como alces, osos o caribús. Hay mucho por visitar, pero te recomendamos no perderte el Lago Louise, a orillas del cual se encuentra el hotel Fairmont Chateau Lake Louise. A quince kilómetros de este se sitúa el Lago Moraine, desde el que podrás disfrutar de vistas panorámicas sobre el Valle de los Diez Picos. Por su parte, el Parque Nacional Jasper, no es tan visitado como el anterior, pero merece la pena porque es donde se encuentra el Monte Robson, el pico más alto de las Rocosas, con 3954 metros de altitud. También dentro de este parque podrás ver el nacimiento del río Athabasca y el lago Pirámide. ¿Te apuntas a la aventura?
Columbia Británica
Esta región al oeste de Canadá, bañada por el Pacífico, fue una importante colonia británica en el siglo XIX, de ahí su nombre. Vancouver es la ciudad de referencia de esta región.
Conoce Vancouver, la capital de la costa oeste
La capital de la Columbia Británica es una ciudad vibrante y su área metropolitana es la tercera más grande del país tras Toronto y Montreal. El centro, donde se originó la ciudad, es conocido como Gastown y posee un curioso reloj con chimenea que emana vapor para marcar las horas. El Parque Stanley es otro de los imprescindibles de Vancouver, ya que se trata del parque urbano más grande de Canadá y cuenta con dos lagos en su interior. Cerca de este, no te pierdas English Bay, donde bañarte en la playa con el mismo nombre y ver el monumento Inukshuk, que honra a los inuits. Uno de los lugares imprescindibles que ver en Canadá para conocer su historia.
Como en la mayoría de las grandes ciudades canadienses, el barrio chino merece una visita, en el de Vancouver destaca el Jardín Chino. Si visitas la ciudad con niños, Science World es un buen lugar donde pasar un rato divertido en familia y admirar la forma esférica del edificio. Para comer, el Mercado de Granville Island o el mercado nocturno de Richmond en los meses de verano son los más populares de la ciudad. Prueba las especialidades de Vancouver, el japadog, un hotdog con toque oriental o el salmon candy, tiras de salmón glaseadas con sirope de arce. ¡Irresistibles!
Cruza el Puente de Capilano en Vancouver
¿Te gustan las alturas? En el norte de la ciudad de Vancouver está el Puente Capilano, una de las atracciones más populares de toda la Columbia Británica. Es un puente colgante a más de 70 metros de altura sobre el río Capilano. El original se construyó en 1889 y se ha ido modernizando hasta hoy en día. Cruzarlo es para aquellos que no sufren de vértigo, pero, aunque no lo tengas, pondrás a prueba tu adrenalina. El Puente Capilano tiene 137 metros de longitud y, además, se balancea mientras los visitantes lo atraviesan. Si te atreves, las fantásticas vistas te compensarán, a tus pies verás el río Capilano y te envolverá un frondoso bosque.
Una vez superado el reto de cruzar el puente colgante, puedes pasar el día visitando el resto del Parque Capilano y probando otras atracciones como Treetops. Se trata de un recorrido de ocho puentes colgantes gracias al que podrás caminar entre las copas de las coníferas a más de 30 metros de altura. También merece la pena ver los tótems de los indios nativos repartidos por el parque y aprender más sobre su cultura ancestral en el Centro Cultural First Nations. ¡Un día completo a menos de media hora del centro de Vancouver!
Ahora que ya conoces los lugares imprescindibles que ver en Canadá desde Toronto hasta Vancouver pasando por las increíbles Montañas Rocosas y las Cataratas del Niágara, ¿cuándo nos vamos?