El tramo del AVE a Galicia que va desde la localidad vallisoletana de Olmedo hasta Santiago de Compostela está actualmente esperando a que se contrate una oferta para encargarse de este tramo. Para hacerse cargo del montaje y mantenimiento de esta línea han presentado sus ofertas tres consorcios distintos, los cuales están liderados por Sacyr, Acciona y Ferrovial.
El contrato será realizado a través de colaboración público-privada y supone un presupuesto total que asciende a los 647,3 millones de euros. La fórmula público-privada de financiación implica que las empresas cuya oferta resulte vencedora tendrán que adelantar parte de la inversión total para que las obras puedan ejecutarse.
El dinero desembolsado por el consorcio luego será recuperado por las empresas una vez que el AVE Madrid-Galicia comience a funcionar. Será la Administración quien dará a los inversores un canon anual a partir de que los trenes de Alta Velocidad empiecen a circular en esta línea.
En cuanto a los sistemas de electrificación, control de tráficos y telecomunicaciones, así como las cuestiones de protección y seguridad de este AVE, Adif ya ha licitado el proyecto. El desembolso total por este contrato, que va dividido en tres lotes, significará un total de 1.123 millones de euros.
