El túnel de La Cabrera es el de mayor longitud de toda la línea AVE que enlazará Madrid con Castilla La Mancha, Comunidad Valenciana y Región de Murcia, ubicándose en el tramo de Motilla del Palancar a Valencia (139 kilómetros), entre Siete Aguas y Buñol. Se trata de una zona de gran complejidad orográfica que obligó a construir diversas infraestructuras: aparte de la Cabrera hay otros dos túneles, el de Siete Aguas (424 metros) y el de Buñol (1.927 metros), sumando entre los tres 9.600 metros que suponen el 85% del total del tramo.
Con una longitud de 7.250 metros, el túnel de la Cabrera se compone de dos tubos circulares paralelos de 8,75 metros de diámetro interior y una sección útil de 53 metros cuadrados, con galerías de interconexión entre tubos cada 400 metros. La excavación de ambos tubos se inició en el extremo más cercano a Buñol, alcanzándose una media diaria de 26 anillos y 41,6 m/día. La finalización de la excavación se produjo en 2008 y en el plazo de 10 meses de trabajos se superó siete veces el récord mundial de avance de perforación diaria mediante tuneladora.
Dicha tuneladora era de doble escudo y se utilizó para excavar los dos tubos, uno tras otro: 6 meses en uno y 4 meses en otro. La máquina medía 204 metros y pesaba 2.700 toneladas, avanzando 1,60 metros cada 20 minutos e instalando vías a medida que excavaba y revestía la bóveda con un anillo de hormigón de 7 dovelas.
Vía: adif.es
