Las vacaciones son uno de esos momentos clave en la vida de cualquier pareja. Casi tan importantes como vuestro primer debate político o la elección de película un domingo por la noche. Por eso, cuando vas a viajar con tu chico/a, tienes que poner un mimo especial en la planificación del viaje: desde la elección del destino hasta los itinerarios. En este sentido, Barcelona es un lugar perfecto: una ciudad con mar, montaña y restaurantes donde aún es posible tener intimidad.
¡Echa un vistazo a estos planes románticos en Barcelona!
Lleva tu relación a un nivel más alto: los búnkeres del Carmel
Compra vino y algo para hacer un buen pic nic bajo las estrellas en uno de los miradores más bonitos de la ciudad.
Comparte una noche lejos de la ciudad, en Cadaqués
Este pueblo pesquero es una de las joyas de la Costa Brava y uno de los rincones más pintorescos de Catalunya. Para llegar puedes alquilar un coche o hacer algunas combinaciones de tren + autobús. Desde Barcelona, el trayecto es de 2 horas aproximadamente.
Aprende nuevos “trucos” en el Museu Eròtic
Desde las primeras civilizaciones hasta la cultura “pin up” en este museo encontrarás información histórica y curiosidades sobre el erotismo. Y ¿quién sabe? Quizás aprendas cosas que puedes poner en práctica en casa…
Ver la puesta de sol junto al mar
Algunos dirán con aire sarcástico, “¡oh, qué original, un paseo en la playa al atardecer!”. Vale, no es un plan muy original, pero sí es un plan infalible para tener un momento de tranquilidad con tu pareja. ¿Y a quién no le gusta ver cómo el cielo se tiñe de naranja mientras hunde los pies en la arena?
Darle algo de chispa a tu relación en Casa Mariol
No hay dos bares con la misma receta de vermú y Casa Mariol tiene una de las mejores. En los últimos años, esta bebida se ha puesto muy de moda en los aperitivos de la ciudad, llenando los bares los domingos al mediodía. Sin duda, el momento ideal para compartir un vermú, unas olivas y quizás algún que otro secreto.
Comparte un arroz en el Xiringuito Escribà
Sería guay pensar que el primer cocinero que puso “Paella (mínimo 2 personas)” en su menú no lo hizo para que su esfuerzo de elaborar este plato tuviera sentido, sino para que la gente se sentara a compartir realmente una comida. Compartir, con todas las letras de la palabra. Dicho esto, acércate al Xiringuito Escribà y pide el arroz que más te guste.
Ver cómo el sol se esconde entre las montañas desde alguna terraza
Una de las cosas buenas de que en Barcelona haya tantos hoteles es poder subir a sus terrazas, pedir un cóctel y ver cómo el sol se esconde tras el Tibidabo.
Pierde la vergüenza en una clase de baile
Ya sabes lo que dicen de las personas a las que les gusta bailar… que tienen buen sentido del ritmo 😉
Si bien España no es el país de la salsa, ni la samba, es innegable que llevamos el ritmo en las venas. Si quieres aprender a moverte al compás de los ritmos latinos, de la rumba catalana o incluso del swing o el foxtrot, en Barcelona encontrarás varias salas en las que se dan clases de baile gratuitas. Si quieres probar, puedes ir a Samba Brasil los jueves a las 22:30 o dejarte caer por Gracia Latina.
Endulza vuestro viaje en el Museu de la Xocolata
En este museo descubrirás la historia y el proceso de elaboración de uno de los dulces más irresistibles que existen: el chocolate. Sus propiedades afrodisíacas son sobradamente conocidas, así que no olvides llevarte una caja de ricos bombones a casa.
Vivir un momento mágico
La “Font Màgica” es un espectáculo lleno de luz y color en el que las fuentes de Montjuïc se “mueven” al compás de la música. Ve con antelación para coger sitio, porque como pasa con todas las actividades gratuitas, siempre se llena de gente.
Ahora que ya tienes todos los consejos para pasar unos días en Barcelona con tu pareja, sólo queda reservar los billetes.