Es uno de los lugares más mágicos de la isla.
Las piscinas naturales y cuevas de Charco Azul integran a la perfección lo salvaje de la piedra volcánica con la delicada transparencia de las aguas del océano.
Una gran extensión de arena fina con las plataneras de fondo es el entorno que presenta Playa Calera, en Valle Gran Rey.
Esta zona es conocida por sus hoteles y la amplia variedad de servicios que harán que el día de playa en familia sea perfecto.
Arena negra que desvela el origen volcánico de La Palma y suntuosas palmeras forman la postal de Playa Puerto Naos. En esta playa es difícil aburrirse puesto que es perfecta para bucear y hacer parapente.
Y al atardecer, el horizonte de Puerto Naos se convierte el lugar perfecto para ver cómo se esconde el sol.
Solía ser una zona de pescadores, pero ahora la playa de El Tamaduste es frecuentada por los habitantes de Valverde, localidad en la que se encuentra, y los veraneantes que buscan tranquilidad y el contraste de las aguas cristalinas con el negro de la arena.
Tan tranquila que puede que al levantar la vista sólo veas la arena negra y algún barco en el horizonte.
La Playa de San Sebastián es perfecta para bañarse y disfrutar de unas vistas privilegiadas de la isla de Tenerife y el Teide mientras tomas el sol .
Con las montañas de fondo y las casas de colores rodeando la pequeña playa de Puerto de Tazacorte, aterrizar aquí es como viajar a un país exótico.
Para un día completo de playa, apúntate a hacer windsurf o da una vuelta por el animado paseo marítimo.