Comunitat Valenciana

En València hay una ciudad dentro de la ciudad. El majestuoso complejo cultural y científico diseñado por Santiago Calatrava es una pequeña ciudad futurista que merece ser observada con atención ya desde el exterior de sus construcciones, antes de visitar cada uno de sus 6 espacios principales. El zoo marino más grande de Europa, el Oceanogràfic, es sin duda un buen inicio. Reúne ejemplares de los principales ecosistemas marinos del planeta, con más de 500 especies: ballenas beluga, pingüinos, tiburones y peces de miles de colores. ¡Una maravilla para los niños! Para seguir asombrando a pequeños y grandes, puedes seguir la visita con el Museo de las Ciencias Príncipe Felipe, con exposiciones permanentes y temporales dedicadas a las ciencias y las tecnologías. Un lugar muy especial para aprender y experimentar: ¡nunca ha sido tan divertido incorporar conocimientos científicos! El Hemisfèric, la construcción más emblemática del conjunto, te sorprenderá por fuera y por dentro. Rodeado de agua, el edificio en forma de ojo alberga un cine IMAX Dome. El Palacio de las Artes Reina Sofia alberga la Ópera de Valencia; la sala principal de este edificio con forma de pez puede acoger hasta 1500 personas. El Ágora es, en cambio, un espacio multifuncional para espectáculos diversos, desde los eventos deportivos hasta los desfiles de moda. ¿Te has cansado con tantos estímulos? Tómate un respiro en el Umbracle, un espacio abierto con plantas y flores locales, ideal para relajarte y seguir disfrutando.

Morella, población situada en el interior de la provincia de Castellón, es muy conocida por los valencianos por su belleza, reconocida también a nivel estatal por formar parte de la red de "Los pueblos más bonitos de España". Su ubicación única, un enclave rodeado de montañas, ha albergado una historia importante, que nos siguen recordando las murallas medievales o el acueducto de Santa Lucía, pero sobre todo su castillo. Su situación privilegiada, en lo alto de la población y sobre una gran roca llamada la "Mola", ha sin duda contribuido a que este castillo se convirtiera en una de las fortalezas más imponentes del Mediterráneo. Esta fortificación de origen islámico, que se remonta al siglo XIII, ha visto pasar numerosas civilizaciones que a lo largo de la historia han contribuido a transformar su arquitectura. Y ha sido testigo de personajes históricos como Abderramán III, el Cid Campeador, Jaume I, el Papa Luna, San Vicente Ferrer, el rey Fernando de Antequera, el príncipe de Viana y el general Cabrera. El castillo consta de una plaza de armas, el Palacio del Gobernador, el aljibe, la torre de la Pardaleta, la prisión de Cacho, restos de palacios reales, torres de Homenaje y pabellones oficiales, todo dividido en tres niveles. En el primer nivel encontramos la entrada y el Palacio del Gobernador. En el segundo nivel se situaban las baterías de artillería y en el tercer nivel se ubicaba el castillo propiamente dicho. Para visitarlo, hay que acceder desde el Convento de San Francisco.

Ciudad de pura esencia mediterránea, Benidorm te sorprenderá con la variedad de sus escenarios. Conocida por sus rascacielos, la ciudad vertical pertenece a los mejores skylines del mundo, junto a importantes urbes como Nueva York o Hong Kong. A la vez, no olvida sus raíces en la tradición de las familias de pescadores. Para recordar este pasado marinero solo hay que dar un paseo por el casco antiguo: la calle Mayor, la plaza de Canalejas o la del Castillo te transportarán a otro tiempo, para descubrir un encantador legado cultural. En la misma plaza del Castillo, puedes visitar su espectacular mirador, considerado "la terraza del Mediterráneo", por sus vistas inigualables de la costa. El Ayuntamiento es, en cambio, una de las construcciones más modernas de la ciudad, uno de sus rascacielos horizontales, con el acabado de sus ventanas decoradas con los nombres y apellidos de los ciudadanos más emblemáticos de Benidorm. Con más de trescientos días de sol al año, no te faltará ocasión para disfrutar de sus playas. Al norte, las calas del Tío Ximo y Almadrava, ideales para el buceo, la tranquilidad y soledad. Las playas de Levante y de Poniente, separadas por el popular paseo marítimo, son conocidas en cambio por su amplia oferta de servicios de ocio y restauración. Entre ellas, en la zona del casco antiguo, encontramos la pequeña cala de Mal Pas,de gran encanto e incomparable belleza. Frente a ella, la Isla de Benidorm es todo un paraíso para los amantes del submarinismo y las actividades marinas.