Luxemburgo es uno de los países de menor extensión de toda Europa, pero su reducido tamaño no lo hace menos interesante. Conocerlo es toda una experiencia y supone adentrarse en un destino que rebosa cultura y belleza. La cerveza es una de las señas de identidad del país, una bebida que siempre acompaña a cualquiera de los platos de la tierra. La gastronomía, además, presenta influencia italiana, alemana y francesa. Todos los vuelos a Luxemburgo aterrizarán en el único aeropuerto que posee el país, el aeropuerto internacional de Luxemburgo-Findel. British Airways, Lufthansa y KLM son algunas de las compañías aéreas que ofrecen vuelos al país desde las principales capitales europeas.
Uno de los atractivos de Luxemburgo es, precisamente, su capital homónima. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, es una ciudad elegante y señorial. Las Casamatas y el pintoresco barrio del Grund son los dos mayores reclamos de esta urbe. De ambiente encantador es, asimismo, Esch-sur-Alzette, la segunda ciudad más grande de Luxemburgo. Cuenta con un animado centro urbano y una extensa área comercial que hará las delicias de los entusiastas de las compras. Si estás buscando paisajes bucólicos, también los encontrarás. Aparte de ser naturaleza pura, el valle del Mosela es el enclave vitivinícola por excelencia del país. No te pierdas tampoco el pueblo de Vianden, probablemente uno de los más bonitos de Europa.
Luxemburgo puede presumir de tener una de las mejores aerolíneas del mundo, Luxair, considerada entre las mejores 15 de 2016 según las opiniones de los viajeros de eDreams.