Países Bajos (u Holanda, como se conoce popularmente) es uno de esos destinos en los que siempre apetece quedarse unos días más. Es el país de los tulipanes, de los pueblos con encanto y de los largos paseos en bicicleta. No en vano, si por algo se caracterizan los Países Bajos es por ser eminentemente llanos. Con una población de algo más de seis millones de personas, esta tierra del norte de Europa es también sinónimo de arte e historia. Las opciones son, por tanto, infinitas. La mayoría de los vuelos a Países Bajos tienen como destino el aeropuerto de Ámsterdam, Eindhoven o Róterdam, pues son los principales. Existen varias aerolíneas que llegan hasta el país, siendo Ryanair, easyJet o Vueling algunas de las más destacables.
Ámsterdam no solo es la capital de los Países Bajos, sino una de las ciudades más dinámicas y turísticas de Europa. Es una urbe abierta y tolerante llena de atractivos. Con frecuencia se la denomina la Venecia del Norte por sus bellos canales flanqueados de casas de colores. Ámsterdam es una ciudad única y de ello te darás cuenta al pasear por sitios como el Barrio Rojo. Diferente pero también encantadora es Róterdam, la segunda metrópoli más poblada del país. Es una urbe de arquitectura fascinante cuyo puerto es uno de los más importantes del continente. Visitar los Países Bajos supone, además, conocer lugares curiosos, como la pintoresca ciudad de Haarlem o el inmenso cementerio de Holten, el mayor del país.
Los Países Bajos pueden presumir de tener una de las mejores aerolíneas del mundo, KLM, considerada entre las mejores 15 de 2016 según las opiniones de los viajeros de eDreams.
